Por Wilfredo Ardito Vega
A comienzos de mayo del 2004, me llamó Javier Martell, entonces estudiante de Estudios Generales:
-Wilfredo, el martes se presenta un libro en el IEP. Es importante que vayamos.
-¿Por qué?
-Porque uno de los comentaristas es Alvarez Rodrich, y podemos invitarlo a sumarse a la lucha contra el racismo.
Yo estaba escéptico sobre la gestión propuesta, pero el libro en cuestión era Memorias del Conflicto, de Carlos Iván Degregori, y de todos modos valía la pena asistir.
En su comentario, Augusto Alvarez Rodrich analizó lo poco que se había avanzado en el cumplimiento de las recomendaciones de la Comisión de la Verdad. Al terminar, mientras el público conversaba con el autor, Javier y yo abordamos al comentarista y le explicamos que deseábamos lanzar una campaña contra el racismo.
-Precisamente se trata de uno de los problemas que denuncia el Informe de la CVR –dije –y si Perú 21 pudiera apoyarnos
-Cuenten conmigo –nos respondió Augusto-. Les apoyaré en todo lo que sea necesario.
Y durante estos cuatro años, así ha sido. Los fotógrafos de Perú 21 fueron los únicos en acompañarnos en nuestras primeras intervenciones urbanas en el Jockey Plaza (Miguel Bellido) y Larcomar (Santiago Barco, al que casi quitaron la cámara los vigilantes), cuando todavía no imaginábamos planear acciones como Empleada Audaz que tendrían tanta cobertura mediática.
Al mismo tiempo, los editoriales de Augusto generaban conciencia en sus lectores sobre las ideas fundamentales de la campaña. Recuerdo especialmente la columna que denominó Fiesta Privada, http://peru21.pe/impresa/noticia/fiesta-privada/2007-07-09/6995, publicada cuando la Municipalidad de Miraflores clausuró el Café del Mar. Augusto señaló que los locales racistas subsisten porque existen clientes que acudían a ellos y pidió que los locales racistas fueran boicoteados.
Días después, me escribió:
La verdad que me sorprende la cantidad de felicitaciones que me han llegado. Pero te soy sincero en que el gran número de felicitaciones es algo que me preocupa más, pues es como que te feliciten por lo obvio, por lo elemental. Es decir, me sorprende haber recibido tantas felicitaciones simplemente por algo tan básico y fundamental como estar en contra del racismo.
Hasta la semana pasada seguía mencionando el tema, como se puede apreciar en la columna sobre el triunfo de Obama, http://peru21.pe/impresa/noticia/negro-casa-blanca/2008-11-04/229163. Desde El Otorongo, el irreverente suplemento humorístico, hubo numerosas ilustraciones contra las prácticas racistas, inclusive denunciando la pasividad de Indecopi frente a las denuncias.
Este año, parecía que el 21 de marzo, Día Mundial contra la Discriminación Racial, iba a pasar desapercibido porque coincidía con el Viernes Santo, pero en Perú 21 fue publicado un aviso a página completa donde aparecía la fotografía de una bolsa de sangre lista para una transfusión con la leyenda: El día que la necesites no te va a importar el color de su piel.
En realidad, desde que Perú 21 comenzó hace seis años me llamó la atención su estructura ágil y su carácter plural. No era ni demasiado denso ni demasiado frívolo y lograba ser disfrutado por un guachimán, un estudiante de Sociología o el gerente de un banco. Sé que muchas personas lo compraban para leer a Guillermo Giacosa o Jorge Bruce y, al mismo tiempo, había quienes lo hacían para leer el recuadro neoliberal en la sección de Economía (supongo que alguien lo leía, aunque a mí me parecía monótono).
Me gustaba especialmente que a través de Perú 21 las reflexiones de académicos como Nelson Manrique, Carlos Iván Degregori y Martín Tanaka llegaran a miles de peruanos y, cuando mis artículos aparecían allí, me daba cuenta que era el diario que la mayoría de mis amigos leía.
El año pasado, por su permanente preocupación contra la impunidad, en el caso de Fujimori y muchos otros, Augusto recibió el Premio Nacional de Derechos Humanos y aprovechó en la ceremonia para señalar que el premio era mas bien un compromiso para seguir adelante.
Este año, Augusto colaboró con el fin del régimen machista que imperaba en el Club Regatas y respaldó abiertamente a Esther Vargas cuando fue retirada de la Universidad San Martín por su orientación sexual. En otro tema vinculado a los derechos humanos y la vida cotidiana, Augusto respaldó la lucha contra el cigarrillo, que viene cumpliendo también de manera personal, para dejar ese hábito. Perú 21 desenmascaró los intereses económicos que durante varios años impidieron que se promulgara el Reglamento de la Ley 28075.
Ahora el entrampamiento ha sido superado: se prohibió fumar en las oficinas públicas y las universidades y a partir del próximo año, tampoco se podrá hacerlo en entidades privadas, incluidas las ONG.
El repentino alejamiento e involuntario alejamiento de Augusto de la dirección de Perú 21 ha generado conmoción a los lectores. Yo me siento muy apenado, porque la lucha contra el racismo pierde un gran aliado y dudo que aparezca un reemplazante tan capaz y tan comprometido con el país. Me preocupa que la línea del periódico pueda variar y que la preocupación por los derechos humanos quede en el pasado. Hay algo que se puede decir pocas veces, pero siento que con Augusto Alvarez Rodrich fuera de Perú 21 todo el país ha perdido.
Por todos estos años, muchas gracias.
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Además
-La muerte de Vicente Zárate Minchán, alcalde del Centro Poblado de Choropampa, generó el pánico en decenas de campesinos. Muchos tienen similares problemas neurológicos, por lo que están solicitando a Yanacocha el pago de seguros de vida. Como se recordará, después del derrame de mercurio que ocurrió en esta localidad los empleados de la empresa promovieron que los campesinos recogieran el mineral sin ningún implemento de protección.
-Telmo Hurtado, responsable de la masacre de Accomarca pasó a una prisión común en Florida luego de un año detenido en un centro para inmigrantes ilegales. Su hermano Jorge, responsable de la masacre de Río Seco y la desaparición de dos niños ocurridas en setiembre de este año, permanece en actividad.
-Sucedió en Chacarilla, sucedió en San Felipe Ahora sucedió en Ayacucho: las pretensiones expansionistas de Plaza Vea generaron un nuevo conflicto. Se había dispuesto vender el área de la residencia universitaria para construir un supermercado. El rechazo de la población motivó al rector de la Universidad San Cristóbal a retroceder, como antes sucedió con los alcaldes de Surco y Jesús María.
-El Congreso convocó a una Mesa de Diálogo para promover la modificación o derogatoria de los Decretos Legislativos 1064, 1080, 1081, 1089 y 1090, que afectan las tierras de las comunidades campesinas y nativas. El Presidente del Congreso le ha solicitado a Yehude Simon que estas normas no sean reglamentadas porque probablemente serán derogadas.
-Agradecemos a las empresas Corporación Syzard (Tortas Gaby), Liderlab y Atilio Palmieri por su compromiso de eliminar los requisitos discriminatorios de las ofertas de empleo y a Prosegur por publicar nuevos avisos donde no aparecen los requisitos de edad.
-En un importante fallo declarando nulo el despido de una mujer embarazada, el Tribunal Constitucional señaló que los actos discriminatorios se configuran tanto cuando existe intención de generar daño, como cuando éste es el resultado, siguiendo la línea de los convenios de la OIT, las convenciones internacionales contra la discriminación y la legislación laboral vigente ( Pueden entrar a Expediente Nº 05652-2007-PA)
-Hablando de sentencias del Tribunal Constitucional, éste se ha reafirmado en que la discriminación se encuentra prohibida no sólo en el acceso al empleo o entre las causales de despido, sino al fijar la remuneración (Expediente Nº 04922-2007-PA.)
-Olivio Huancaruna, propietario de Café Altomayo y otras prósperas empresas ha aparecido en una pequeña fotografía de la sección Sociales de El Comercio. Al parecer su prosperidad económica llevó a la editora María Elena Peschiera a hacer una excepción en su política de selección de fotos monorraciales.
El aporte:
Muy difícil que ocurra algo como lo de Obama en el Perú, porque somos un país con muchos problemas de autoestima y esto se aprecia en el esfuerzo de las mujeres por parecerse más al biotipo occidental. Mi madre es argentina, pero, vivió treinta y un años en el Perú y dice que el recuerdo más negativo que tiene es el racismo, ese racismo en que el cholo repudia al cholo. Desde que cantamos esa primera y fatídica estrofa del Himno Nacional, estamos inferiorizándonos (una filósofa).
La frase W
Muchos de los que claman por la salida de Alvarez Ródrich de Perú 21, guardaron silencio cuando Giacosa salió de Canal 7.
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