Imagen referencial. Foto: Radio Marañón
Con una movilización pacífica este 28 de febrero, miles de ronderos, indígenas y otros ciudadanos de diversas regiones del norte peruano expresaran su rechazo total a la minería en todas sus formas.
Servindi, 27 de febrero, 2024.- Una marcha para rechazar a la minería en todas sus formas (formal, informal e ilegal) se realizará este miércoles 28 de febrero en la ciudad de Jaén, región Cajamarca.
La marcha espera convocar a más de 3 mil personas, entre ronderos, indígenas y otros ciudadanos, provenientes de diversas regiones del norte, como Piura, Lambayeque y Amazonas que rechazan totalmente la minería en sus territorios.
Esta movilización pacífica será acompañada por la Iglesia Católica, a través del Vicariato San Francisco Javier (Jaén), y estará vigilada por 180 ronderos licenciados para evitar cualquier tipo de inconvenientes.
Se espera la llegada de delegaciones de las provincias de Colasay, Cutervo y Jaén (Cajamarca); Chachapoyas, Bagua, Condorcanqui (Amazonas); Huancabamba y Ayabaca (Piura) y Lambayeque, entre otros sectores.
La movilización, según el Centro Amazónico de Antropología y Aplicación Práctica (CAAAP), responde a la preocupación por la contaminación del agua, la presencia de peces muertos, la deforestación y destrucción de ecosistemas frágiles por parte de las empresas mineras.
También hay una preocupación por el peligro que supondría la entrega de más concesiones en el norte, como es el caso del distrito de Colasay (Jaén), donde el Estado pretende entregar seis concesiones.
Además, exigen al gobierno que se respete su derecho a la consulta previa y tener voz en las decisiones que afectan sus territorios y recursos naturales para evitar así el inicio de protestas y conflictos sociales.
Cabe indicar que esta protesta se da cuando el Gobierno Territorio Autónomo de la Nación Wampis (GTANW) denuncia la invasión y ataque masivo de mineros ilegales en el distrito de Río Santiago, provincia de Condorcanqui, Amazonas.
Se trata de un problema que se intensifica y agrava con la aparición de más dragas ilegales, situación que se repite en El Cenepa, según lo denunciado por el Gobierno Territorial Autónomo Awajún (GTAA).
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