APRODEH celebra cuatro décadas de incansable lucha en respuesta a la violencia política de los años 90 que atentó con los derechos humanos.
Servindi, 13 de setiembre, 2023.- La Asociación Pro Derechos Humanos (APRODEH) cumple este mes 40 años de trayectoria íntegra y consecuente por la defensa de los derechos humanos con una trayectoria de la que pocas instituciones pueden ostentar.
Fue fundada el 12 de setiembre de 1983, como una organización no gubernamental y sin fines de lucro, dedicada a la defensa, promoción y difusión de los derechos. humanos.
APRODEH se inició a partir de la defensa a las víctimas de la violencia política en Perú en los años 90 y su labor se desplegó en dos grandes ejes temáticos: los Derechos Civiles y Políticos (DCP) y los Derechos Económicos, Sociales, Culturales y Ambientales (DESCA).
El primero prioriza la lucha contra la impunidad, la búsqueda de verdad, justicia y reparación para las víctimas; y el segundo trabaja la promoción y defensa de los DESCA y la integralidad de los derechos humanos.
APRODEH forma parte de diferentes redes preocupadas por la defensa de los derechos humanos, como la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH), la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) y SOS Torture.
Se relaciona también con el estado peruano y sus instancias políticas y militares. No sólo denuncia las violaciones que se cometen sino también busca establecer mecanismos de diálogo y propuesta.
Además, tuvo un papel de liderazgo en la promoción de la integralidad de los derechos humanos y en el proceso de formación de la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR) en Perú.
La labor realizada por APRODEH le ha ganado deparado enemigos, amenazas y agresiones de parte de los partidarios de la impunidad y de quienes violaron los derechos humanos y perpetraron actos de corrupción.
Sin embargo, ello no ha detenido en ningún momento la voluntad institucional de seguir adelante en su propósito de justicia.
Contexto de origen
En los 80, el Estado peruano respondió a la brutalidad terrorista con una estrategia demoledora, y con una estrategia de eliminación selectiva en los años 90.
El sistema judicial no tomaba en consideración a las víctimas, ya que no había ninguna investigación o sanción penal en contra de los responsables.
La asociación surge poco después de que se iniciara un período de violencia durante el régimen de Alberto Fujimori para brindar acompañamiento legal a las víctimas tanto de Sendero Luminoso como de las Fuerzas Armadas.
Si bien se lograron sentencias nacionales e internacionales, la lucha contra la impunidad aún continúa. APRODEH sigue acompañando a las víctimas para encontrar justicia, asesorándolos y representándolos ante las cortes nacionales y supranacionales.
Fundadores y principal impulsor
Sus fundadores Francisco Soberón Garrido, Martha Giraldo Alayza, Fernando Rospigliosi Capurro, Liliana Panizo Muñiz y Manuel Piqueras Luna, apoyaban a la Comisión de Derechos Humanos del Congreso de la República instalada en 1980.
Lamentablemente, su principal impulsor falleció el 2022 a causa de complicaciones por la COVID-19. “Pancho” Soberón era uno de los defensores de los derechos humanos más distinguidos en el país.
En medio de una época de violencia política y terrorismo en Perú, Francisco Soberón asumió un papel destacado como exsecretario ejecutivo de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH).
Su labor y su enfrentamiento al grupo terrorista Sendero Luminoso lo convirtieron en uno de los primeros activistas peruanos en alzar la voz a nivel internacional contra el terrorismo.
Logros
En representación de las víctimas, aseguró el seguimiento de las acusaciones a nivel nacional, consiguiendo sentencias contra Julio Salazar Monroe, el ex jefe de Inteligencia Nacional, y Vladimiro Montesinos.
Patrocinó casos emblemáticos de violaciones a los derechos humanos en Perú como el de Barrios Altos y La Cantuta por los cuáles fue condenado a 25 años de cárcel el exdictador Alberto Fujimori.
En la actualidad, APRODEH actúa en casos jurídicos tales como el caso sobre lo ocurrido en la base militar “Cabitos” en 1983, donde un total de 53 personas fueron torturadas, violadas y desaparecidas.
Además, se encuentra involucrada en el caso “Huanta 84”, relacionado con los acontecimientos en el estadio de la ciudad de Huanta, donde se cometieron múltiples violaciones a los derechos humanos.
Desde Servindi, expresamos nuestro saludo
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