Foto: Facebook de "Retablo".
Servindi, 14 de mayo, 2019.- La película hablada íntegramente en quechua, Retablo, se estrena este jueves 16 de mayo en cines comerciales del país.
La cinta viene de ganar 22 premios internacionales, destacando el “Teddy Awards” del Festival de Cine de Berlín.
Retablo cuenta cómo el retablista Noé intenta inculcar el oficio familiar a su hijo Segundo, un adolescente que vive en Ayacucho. La historia toma un giro inesperado cuando el pueblo se entera del secreto de Noé.
El largometraje cuenta con la participación de los actores Junior Béjar y Amiel Cayo. A este elenco se suma la reconocida artista ayacuchana Magaly Solier.
La película de Álvaro Delgado-Aparicio es una coproducción entre Perú, Alemania y Noruega. Retablo aborda temas como la herencia cultural, el amor y la homofobia.
Esta ópera prima logró su exhibición en salas nacionales gracias al premio de distribución del Ministerio de Cultura.
Hacer una película jamás es fácil, hasta el más mínimo detalle es vital y la productora Enid "Pinky" Campos, y su genial equipo, lo saben mejor que nadie. Descubre los secretos de la producción de Retablo en este penúltimo clip. ¡Te esperamos en el cine!
ESTRENO: 16 de MAYO pic.twitter.com/dvFKYf9tcW
— Retablo La Película (@PeliculaRetablo) May 11, 2019
Se habla en quechua
En diversas entrevistas a medios internacionales, el director indicó que si bien Retablo se escribió inicialmente en español, decidió filmarla en quechua tras un ensayo.
"Decidí hacer la escena en quechua y fue tan auténtico que me di cuenta que la lengua materna de los tres actores era el quechua. Hacerla en español era como traducir algo", declaró para Radio Francia Internacional.
Este cambio, según relata, generó cierto temor en su equipo de grabación.
"Mi productora me dijo que iba a ser complejo rodarla en quechua, para la edición también. Pero nos rodeamos de dos buenos intérpretes que nos acompañaron todo el tiempo y comenzamos a ir a clases".
Otra persona que alentó esta iniciativa fue una de sus actrices: Magaly Solier. "Me empujó a hacerla en quechua. Fue difícil, pero fue la mejor decisión", concluyó.
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