Cámara de Representantes de Colombia.
Servindi, 11 de octubre, 2022.- El Congreso de la República de Colombia aprobó el lunes 10 de octubre la ratificación del Acuerdo de Escazú en un cuarto y último debate por lo que ahora pasa a sanción presidencial.
El presidente Gustavo Petro celebró la noticia a través de su cuenta de Twitter, felicitando "al Congreso y a la sociedad colombiana" por haber aprobado este tratado que "busca proteger el medioambiente y las y los ambientalistas".
Ha sido aprobado como ley el tratado internacional de Escazú, que busca proteger el medio ambiente y las y los ambientalistas.
Felicitaciones al Congreso y a la sociedad colombiana.
— Gustavo Petro (@petrogustavo) October 11, 2022
"Se logró en 63 días lo que no se había logrado en tres años", destacó Susana Muhammad, ministra de Ambiente, quien consideró que "no solo viene a generar un mejor estándar democrático en las decisiones ambientales, sino que en el fondo le da un poder político a la ciudadanía".
Desde mañana "empieza la ruta de implementación mientras la Corte Constitucional avanza la ratificación del acuerdo", agregó Muhammad.
La cartera de Ambiente contempla cinco rutas para implementar el acuerdo, entre las que se encuentran una estrategia de acompañamiento a defensores ambientales y un sistema de información sobre conflictividad socioambiental.
La aprobación se alcanzó con 121 votos a favor frente a un voto en contra en una sesión que se extendió por más de dos horas y media, y de la que se ausentaron varios partidos opuestos a la decisión, principalmente del Centro Democrático.
Escazú
Eñ "Acuerdo regional sobre el acceso a la información, la participación pública y el acceso a la justicia en asuntos ambientales en América Latina y el Caribe" o Acuerdo de Escazú ha sido ratificado por trece países.
Colombia se conviertiría en el país número 14 en ratificar el acuerdo que entró en vigor en abril de 2022, durante el Día Internacional de la Tierra, celebrado el 22 de abril.
Se trata del primer acuerdo firmado a nivel mundial orientado a proteger a los defensores ambientales, un importante tratado para América Latina, la región más mortal para defender el medioambiente, según la organización Global Witness.
Además de proteger a los ambientalistas, el Acuerdo de Escazú busca garantizar la mejor aplicación de políticas ecológicas, garantizar los derechos ambientales y salvaguardar la biodiversidad en tiempos de crisis climática.
Hasta ahora el Acuerdo de Escazú ha sido ratificado por Antigua y Barbuda, Argentina, Bolivia, Ecuador, Guyana, México, Nicaragua, Panamá, San Vicente y las Granadinas, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, Uruguay y Chile. Para Colombia, el Acuerdo de Escazú es un instrumento clave que le permitirá superar las ambigüedades actuales que tiene la legislación ambiental y contar con un marco jurídico unificado y estandarizado que proporcione reglas claras a todos los actores nacionales.
Opositores
Los opositores del acuerdo afirman que el Acuerdo de Escazú les da agencia a organizaciones internacionales para entrometerse en asuntos ambientales internos del país, que según ellos son del orden nacional.
Congresistas de la derecha consideran además que se pueden generar algunos riesgos para la soberanía del país sobre sus territorios.
El Centro Democrático en pleno se pronunció en contra de este acuerdo. La principal crítica es que se podría afectar al sector productivo en todos los niveles y la confianza inversionista.
“Luego de un minucioso estudio jurídico y político sobre el acuerdo, nuestra bancada encuentra que Escazú significa la pérdida de la soberanía de Colombia, por tratarse de un acuerdo que supone la prevalencia del derecho internacional sobre el orden interno”, dijo la colectividad.
De hecho, durante el debate en la Plenaria de la Cámara, se retiraron las bancadas del Centro Democrático y de Cambio Radical.
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