Servindi, 9 de abril, 2024.- 115 organizaciones de 39 países exigen a las autoridades nacionales detener abusos y violencia de la empresa de palma aceitera Industria Chiquibul que opera en Guatemala, en perjuicio de las comunidades indígenas y campesinas
Señalan que la empresa provee de aceite de palma a transnacionales como Nestlé y Unilever y afecta directamente a la comunidad Santa Elena, en el municipio de Sayaxché, región norte de Guatemala.
A través de una carta pública indican que la empresa “Ha acumulado un rastro de violaciones a los derechos de las comunidades indígenas y campesinas”.
Ello incluye la apropiación ilegal de tierras comunitarias en Aldea Carolina, la contaminación del río San Román, criminalización (...) violaciones a los derechos laborales y deforestación”, precisan.
Las organizaciones piden suspender el proceso certificación Roundtable on Sustainable Palm Oil (RSPO) a favor de Chiquibul, que supuestamente garantiza que la industria tiene el compromiso y cumplió con requisitos de sostenibilidad.
Maquillaje verde
El documento alerta sobre la instalación ilegal de un destacamento de fuerzas de seguridad de la empresa, amenazas, intimidación con armas y criminalización en complicidad con la Policía y el Sistema Judicial.
Ello incluyen falsas acusaciones y detenciones arbitrarias.
Los firmantes expresaron su apoyo y solidaridad con la comunidad Maya Q'eqchi Santa Elena y exigen detener el falso proceso de consulta y certificación internacional iniciado por Industria Chiquibul que califican de “maquillaje verde”.
La carta fue dirigida a la Presidencia de la República, a los ministerios de Agricultura y de Ambiente, a las comisiones de Derechos Humanos y de Ambiente del Congreso de la República, y al Ministerio Público.
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